El protocolo HTTP y las transacciones de datos

El protocolo HTTP y las transacciones de datos
Como ya explicamos, el protocolo utilizado para el acceso, visualización y navegación web es el denominado HTTP. Su última versión es la 1.1, y su funcionamiento de conexión es simple, ya que se basa en redes cliente-servidor. Cuando el usuario ingresa una dirección de Internet (por ejemplo, http://www.mydaemon. com) en su navegador (cliente web), realiza una petición de datos. El protocolo http primero resolverÔ la configuración DNS establecida en Internet que corresponde a ese dominio, para poder establecer cuÔl es el número de IP asociado con esta dirección, por ejemplo, 64.226.24.116. Una vez resuelto esto, intentarÔ establecer la comunicación con dicho servidor mediante el puerto pre-determinado de la Web, es decir, el puerto 80. Cuando se ha establecido esa conexión, se envía la petición al servidor para que se muestre la pÔgina solicitada en el navegador del cliente. Para eso se le indica al servidor web los datos necesarios para la transferencia de los datos, como el número de IP o la pÔgina que se desea visualizar (si el cliente no especificó ninguna en particular, se mostrarÔ la pÔgina establecida como inicial en el servidor web de dicho sitio). Con todos los datos resueltos, el servidor web enviarÔ la respuesta al cliente remoto, mostrando la pÔgina correspondiente en su navegador. Una característica muy importante del protocolo HTTP es que no cuenta con la posibilidad de almacenar datos sobre las conexiones, por lo que cuando una transacción de petición/envío de datos finaliza, los datos que se establecieron se perderÔn. La solución a este conflicto se realiza mediante las cookies. Se trata de archivos pequeños que se almacenan en la mÔquina del usuario cliente y en el servidor web, y guardan toda la información recopilada con respecto a los usuarios (login, contraseñas, etc.), lo que sirve para que cuando ingresemos nuevamente en ese sitio, seamos reconocidos por él.

No hay comentarios.